El compost es un abono orgánico, obtenido a partir de la descomposición controlada de la materia orgánica. Es un producto estable, de olor agradable y con múltiples propiedades beneficiosas para los suelos y plantas, que se consigue tras la biodegradación en presencia de oxígeno de los residuos orgánicos.
En el área productiva de Molvento se combinan:
– Residuos orgánicos, procedentes de las actividades productivas agroecológicas como la hortícola y de aromáticas, productos de las actividades de desmalezado, poda y cosecha.
– Residuos de la actividad de cría de llamas, cuyas heces son muy ricas en nutrientes y trabajan muy bien como activadores del proceso de compostaje.
Estos dos tipos de residuos orgánicos se acondicionan y mezclan en pilas de compostaje, donde se trabajan con tareas de aireación y riego, para favorecer la biodegradación. Se van construyendo distintas pilas, con distintos tiempos de “maduración”
Una vez que “madura”, es decir, pasó el tiempo correspondiente para la degradación, que dependerá del tipo de material a compostar, se procede al zarandeado del mismo, obteniendo un producto que se manipula fácilmente.
El producto es un abono orgánico de muy buenas características productivas que puede usarse en maceta o cantero.
Estos abonos permiten enriquecer la biodiversidad del “suelo vivo” donde producimos, así lo explican los especialistas del área productiva.